Editorial

El punto medio

El punto medio

Gobierno y Barrick Gold arribaron ayer a un acuerdo preliminar para modificar el contrato de explotación de la mina Pueblo Viejo, que en principio puede ser calificado de satisfactorio porque  el Estado incrementa su participación en las utilidades que generan la extracción y exportación del oro y plata de esa mina, principalmente por vía de un impuesto que entrará en vigencia de inmediato, en vez del 2019,  como estaba previsto en el convenio anterior.

Antes de ese acuerdo, la administración del presidente Danilo Medina tenía en cuatro años apenas 377.4 millones de dólares, equivalentes a un 4.5 por ciento de los ingresos brutos por exportación, calculados a US$1,600 la onza, pero al concluir las negociaciones los ingresos ascenderán a US$2,200 millones, casi seis veces más.

Se reconoce como un logro del equipo  negociador  que los ejecutivos de Barrick acepten  iniciar el pago de inmediato del Impuesto sobre Participación de Utilidades (PUN), que representa un incremento  en los ingresos del Gobierno de  mil 283 millones de dólares, sobre cálculo de mil 600 dólares la onza de oro.

Aunque los términos del acuerdo incluido en el Memorándum de Entendimiento estipulan que durante la vida útil de la mina el Gobierno  recibirá  unos once mil 600 millones, en vez de los US$11,000, previstos en principio, el logro mayor radica en que  la gestión del presidente Medina  (2013-2016) percibirá  unos  dos mil 200 millones de dólares, en vez de US$377.4 contemplados en el contrato revisado.

Aun así,  Barrick obtendría  en los próximos  cuatro años utilidades por US$8,386.8 millones por exportaciones de oro de Pueblo Viejo, a un precio promedio de mil 600 dólares la onza, lo que explica  el interés  que a última hora mostró  esa multinacional por  arribar a un acuerdo con  el Gobierno, porque “lo demasiado hasta Dios lo ve”.

Corresponde a técnicos y políticos valorar el alcance real del acuerdo de renegociación de ese  contrato con Barrick Gold, pero a favor  del Gobierno debería subrayarse que  logró incrementar en casi seis veces su participación sobre utilidades en la operación de la mina para los próximos  cuatro años sin   afectar la garantía  que debe ofrecer el país a la inversión extranjera.

Ese convenio -que supone un incremento  en los ingresos  del Gobierno por mil 600 millones durante la vida útil de la mina, también garantiza la permanencia de una inversión de más de  cuatro mil millones de dólares y las expectativas de empleo, transferencia tecnológica y otros valores agregados  sobre la economía.

 Es posible que la población aspirara a un resultado de mejor provecho  que el anunciado por el Gobierno  al término de tan difíciles y cruentas negociaciones con la  multinacional adjudicataria del derecho de explotación de Pueblo Viejo, pero  lo logrado  se acerca  al “punto medio” de que habló el presidente  Medina. No fue lo ideal, pero sí lo posible.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación