SANTIAGO. Ante el aumento de los actos delictivos en las principales ciudades del país los horarios de los cultos religiosos, tanto católicos como evangélicos, han tenido que ser cambiados por la seguridad de los feligreses. Al respecto, el arzobispado de Santiago autorizó a las parroquias modificar los horarios de las misas y otras actividades religiosas nocturnas, debido al auge de la delincuencia en esa ciudad.
“Quién iba a pensar que algunas actividades religiosas, y de otra índole, tendríamos que acomodarlas a nuevos horarios para lograr la asistencia deseada, porque hoy, el día y la noche, fruto de la delincuencia, se han convertido en una tentación”, expresa el semanario Camino, en su editorial de la edición que se publicará este domingo.
El vocero del Arzobispado, Lennys Tejada, confirmó hoy que desde hace varios meses se han visto en la necesidad de acomodar a nuevos horarios algunas actividades religiosas, y explicó que las misas que se oficiaban a las 7:00 de la noche se están realizando a las 5:30 de la tarde.
“Duele observar que poco a poco el ciudadano comienza a desconfiar del otro, a sospechar de cualquier persona que anda extraviada y busca una dirección”, indica.
El semanario Camino considera que “tener las puertas y ventanas cerradas como una cárcel por temor a un atraco, o asalto se va haciendo cotidiano”.
Es de opinión de que, ante esta realidad “no debe haber espacio para el lamento, sino para la acción proactiva que impida que nos roben la alegría”.
Camino plantea que las autoridades deben actuar de manera rápida y eficiente para devolverle a este pueblo la seguridad ciudadana, que es uno de sus principales reclamos.
“Al extranjero que llega al país le sorprende y valora el alto grado de hospitalidad de nuestra gente. Somos parte de un pueblo acogedor y solidario, con las manos francas, siempre dispuestas al encuentro”, señala.
Empero, Camino dice que es lamentable que la mala conducta de algunos dominicanos “nos haga cambiar y entonces echemos en el olvido esa manera de ser que es como un carnet de identidad”.
Los evangélicos
En mayo del pasado año varias congregaciones cristianas informaron que debido al auge de la delincuencia, en las inmediaciones de los templos, habían tenido que cambiar los horarios de los cultos.
Explicaron que al salir de las ceremonias religiosas, muchos feligreses son sorprendidos por los delincuentes que los despojan de los objetos de valor
En la ocasión, sacerdotes y pastores consultados sobre el problema confesaron que reciben con insistencia las peticiones de la feligresía de que sean movidas a horarios menos peligrosos las misas y los cultos religiosos.
Especialmente los que se realizan en las primeras horas de la mañana o la noche.
