Cuando ya se sienten los efectos del paso de la tormenta Isaac cerca de la costa sur de República Dominicana, se mantiene vigente hoy la proclama que el presidente Danilo Medina arengó ayer a los organismos de prevención y socorro, de que nadie muera por negligencia.
El mandatario ha instruido al Centro de Operaciones de Emergencia (COE) a hacer uso de todo el andamiaje del Estado para prevenir desgracias o poder asistir a familias que resulten afectadas por inundaciones, crecidas, deslizamiento o cualquier otro evento provocado por el meteoro.
Lo más inmediato debe ser el traslado preventivo de familias asentadas en zonas vulnerables para quienes, en caso de que no puedan refugiarse en casas de familiares o amigos, se han habilitado unos dos mil 700 albergues provisionales.
Aunque el aviso de condiciones de huracán fue degradado al de aviso de condición de tormenta, la población debería ser advertida de que en cualquier circunstancia, el paso de Isaac provocará lluvias significativas sobre todo el territorio nacional y que los aguaceros se extenderían hasta el lunes.
Las autoridades han puesto en ejecución un vasto programa de prevención y socorro con motivo del paso de la tormenta Isaac, que incluye a veintidós instituciones, pero nada sería efectivo sin el decidido concurso de la ciudadanía que debe atender y obedecer a todos los requerimientos de la Comisión Nacional de Emergencia.
Gobernadores, dotaciones militares y policiales, Defensa Civil, Cruz Roja, cuerpos de bomberos, instituciones de servicio, iglesias y alcaldes pedáneos trabajan de manera coordinada en labores de contingencia para que, con la voluntad de Dios, no se reporten pérdidas de vidas humanas.
Satisfacen las declaraciones del director del Instituto de Recursos Hidráulicos (Indrhi), de que los embalses de presas están en las mejores condiciones para recibir agua sin que se produzcan desbordamientos, aunque nunca sobra incrementar acciones precautorias.
En razón de que la Isla Hispaniola se ubica en el mismo trayecto de la mayoría de los huracanes que transitan por el Caribe, los dominicanos están compelidos a consolidar una cultura de prevención que se accione de manera automática al primer boletín de Meteorología sobre aviso de tormenta o ciclón. ¡Que nadie muera por negligencia!

