Opinión Articulistas

Mística Universal

Mística Universal

Alberto José Taveras

En un mundo globalizado donde las culturas interactúan de manera constante, las religiones continúan siendo pilares fundamentales de identidad, moral y visión existencial. Aunque cada tradición espiritual posee rasgos únicos, todas comparten un mismo anhelo: encontrar sentido, trascendencia y una conexión con lo divino. Entre las religiones más influyentes de la actualidad destacan el cristianismo, el islam, el hinduismo, el budismo y el judaísmo, cada una con su propio enfoque sobre la verdad espiritual y el destino humano.

El cristianismo, religión con mayor número de seguidores, se centra en Jesucristo como hijo de Dios y redentor. Su mensaje central gira en torno al amor, el perdón y la fe como vía de salvación. La Biblia es su texto sagrado, y aunque sus principales ramas, católica, protestante y ortodoxa, difieren en organización y doctrina, todas coinciden en la creencia en un Dios único y en la figura de Cristo como guía espiritual.

El islam, segunda religión más numerosa, proclama la existencia de un solo Dios (Alá) y reconoce a Mahoma como su último profeta. El Corán orienta la vida espiritual y social de los creyentes. Sus prácticas fundamentales se resumen en los cinco pilares: fe, oración, limosna, ayuno y peregrinación. Pese a las diferencias entre sunníes y chiíes en aspectos históricos y políticos, ambos comparten los principios esenciales revelados por Mahoma.

El hinduismo, una de las tradiciones más antiguas, destaca por su diversidad interna. No posee un fundador único ni un credo uniforme. Sus creencias se estructuran en torno al karma, la reencarnación y la búsqueda de la liberación espiritual (moksha). Textos como los Vedas y el Bhagavad Gita son fundamentales en su pensamiento. La presencia de múltiples deidades refleja su riqueza cultural y la amplitud de caminos hacia lo sagrado.

El budismo, surgido en la India y extendido por Asia, se basa en las enseñanzas de Siddhartha Gautama, el Buda. No se centra en un dios creador, sino en la superación del sufrimiento a través del Noble Camino Óctuple. Su meta es alcanzar la iluminación o nirvana. Aunque existan distintas escuelas, Theravada y Mahayana, todas coinciden en la búsqueda de la paz interior, la serenidad y la compasión.

El judaísmo, una de las religiones monoteístas más antiguas, fundamenta su fe en la alianza entre Dios y el pueblo de Israel. Su texto central es la Torá, y concede gran importancia a la ley, la ética y la preservación de la tradición.

Pese a sus diferencias en doctrina, prácticas y visión del más allá, estas religiones coinciden en promover valores universales como la justicia, la compasión y el respeto por la vida. Todas expresan, desde sus propias perspectivas, el anhelo humano de comprender lo trascendente: una verdadera mística universal que une a la humanidad en su búsqueda espiritual compartida.