Editorial

Nochebuena

Nochebuena

Los dominicanos festejan hoy la Nochebuena, la más tradicional efeméride cristiana durante la cual se celebra en familia el nacimiento del Hijo de Dios, alumbrado por el vientre inmaculado de María, primogénito que   a los 33 años con su sacrificio en la cruz redimió del pecado original a la humanidad.

Nochebuena es, pues, sinónimo de  unidad, gozo espiritual, esperanza, fe, perdón y solidaridad, atributos que acompañan la venida del Redentor que se produjo en un pesebre  de Belén como para  clamarle al mundo que la humildad es don  esencial del creador de los cielos y tierra.

Tan significativa celebración de la cristiandad ha podido  sobrevivir  por  siglos al paganismo y  se mantiene como auténtico espacio de reflexión y alegría alentado por la buena nueva del nacimiento del Niño Jesús, “hijo único de Dios,  engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho”.

Es por eso que la familia está compelida  a celebrar Nochebuena  y Navidad en el mayor de los ambientes de paz, amor y unidad y en el más amplio espíritu cristiano, aunque  aún los ateos o cultores de otras  religiones  hacen  suyas las virtudes cívicas que se cultivan al  amparo de tan tradicional festejo.

El día de hoy y el de mañana aconsejan  a la prudencia, a la sensatez, al disfrute  sin exceso, al respeto al derecho ajeno, que debería ser  el comportamiento de cada quien todos los días de la vida, como tributo al Altísimo por haber sacrificado a su hijo unigénito  por la redención  humana.

Con mucho tino la Iglesia católica ha reclamado  a los ciudadanos controlar la ingesta de alcohol y conducir con prudencia para evitar daños que se pueden prevenir, aunque las autoridades han advertido que  apresarán a conductores ebrios y decomisarán armas de fuego que sean exhibidas en público.

Dios quiera que pronto llegue el día cuando  la luz de la verdadera justicia social alumbre a todos los dominicanos, se conjuren  los flagelos del hambre y la marginalidad y cese por  siempre la explotación del hombre por el hombre.

El Nacional formula votos por la ventura  y prosperidad de  sus lectores y de toda la población a los que extiende  fervientes deseos de que disfruten en familia una feliz Nochebuena y venturoso día de Navidad.

El Nacional

Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación