Pensionados de distintas instituciones estatales pidieron al presidente Danilo Medina que disponga un aumento de sus salarios a 20 mil pesos ya que los cuatro mil 800 pesos que devengan como salario neto no les alcanza para vivir. También exigen que se les entregue el dinero que les han dejado de pagar porque desde hace seis años no reciben ningún tipo de aumento salarial.
“Hemos sido condenados a morir de hambre” lamentó Carlos Mejía Acosta, de 74 años, quien asegura que trabajó más de 40 años en distintas instituciones del gobierno, entre ellas la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
Mejía Acosta visitó la redacción de El Nacional en compañía de Seferino Hernández Hernández, de 66 años, quien laboró en el Ministerio de Salud Pública por 14 años y fue pensionado por pérdida de visión; y de Justo Germán, de 96, que trabajó en varias instituciones.
Los pensionados, que residen en Cristo Rey, se quejaron que por sus sueldos de miseria viven de la caridad de sus hijos y vecinos, que deben darles dinero hasta para comprar medicamentos.
Aseguraron que al no aumentarles sus sueldos se les violan los derechos humanos.
“Esto lo debe escuchar el mundo, especialmente la Corte Interamericana de los Derechos Humanos”, clamó Mejía Acosta quien tiene cáncer de próstata.