Los incidentes han marcado la apertura del juicio preliminar sobre el supuesto desfalco y otras irregularidades que la Procuraduría Especial de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) atribuye al exjefe del Ministerio Público, Jean Alain Rodríguez, y otros imputados.
Por la trascendencia del juicio, que se reanudó el viernes, tiene que cumplirse con todas las normas y garantizarse el debido proceso. En el expediente sobre la supuesta trama de corrupción, que la Pepca denominó “Operación Medusa”, se imputa a 41 personas físicas y más de 20 empresas.
El juicio preliminar no pudo iniciarse en otras dos ocasiones, mientras una de las abogadas de Rodríguez declaró que el tribunal había ordenado entregar las pruebas a los acusados, otorgando a la Pepca un plazo de 20 días.
Por los cargos y la jerarquía de los imputados el juicio ha generado muchas expectativas.