El curso que suelen tomar los procesos electorales torna más urgente un reglamento que regule la propaganda y garantiza la equidad en la campaña. Y es lo que persigue el juez de la Junta Central Electoral (JCE), Eddy Olivares, con un proyecto que también castiga las violaciones en que se incurran durante los procesos. Las denuncias sobre el abuso de los recursos públicos y los escándalos que alejan el debate de las propuestas programáticas, reduciéndolo a un plano personal, son para que se pondere la necesidad de regular las campañas. Después de todo es atribución de la JCE reglamentar la propaganda en los medios de comunicación con el fin de evitar distorsiones, alusiones calumniosas o injuriosas que afecten el honor de candidatos o dirigentes políticos, así como menciones que puedan intranquilizar a la población. El proyecto no se limita sólo a regular la propaganda, sino que prohíbe inauguraciones y programas de apoyo social o comunitario dos meses antes de la fecha de las elecciones. Se trata de una saludable iniciativa, que debe ser ponderada por la JCE.
El Nacional
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