Opinión Articulistas

¡Qué derrota!

¡Qué derrota!

Manuel Fermín

El inesperado anuncio de que 330 mil estudiantes de la escuela pública quedarán fuera del sistema por falta de aulas y docentes, supone una gran decepción para los padres y tutores. Pero lo más decepcionante es que el ministro de Educación, en su afán por disipar la sospecha de descuido, busca pasar de puntillas por el enriscado camino, e intenta reducir la fatídica realidad ofreciendo quinientos dólares (por qué no pesos) por niño/ año a las familias afectadas para buscarle cupo en colegios privados.

Ante semejante absurdidad administrativa nos sumimos en profunda reflexión: ¿dónde estamos fallando en la gestión educativa? Lo más fácil es culpar a los gobiernos anteriores, pero esta administración recibió presupuesto y centenares de escuelas en construcción para haber resuelto el problema de falta de aulas y maestros.

Pero no, se enrocó en el pobre argumento de hilvanar los inconvenientes de los contratos y los constructores y hoy el resultado es que por la mediocre gestión quedarán fuera del año escolar centenares de miles de niños, desatando una oleada de críticas al Ministerio y al Gobierno.

Sin embargo, las autoridades mantienen un tono condescendiente, incluso servil facilitándole ingreso a cientos de miles de niños hijos de los renegados y malagradecidos pobladores haitianos, que consideramos como una alta traición a un país que pronto estará inmerso en una reforma fiscal que será de considerarse de infarto.

Mientras tanto, ante tanta realidad desbocada los pobres dominicanos, y que son los más afectados, tendrán que hacer de los malabares diarios de buscar el sustento, es decir, esa vocación de urgencias reiteradas de la pobreza, cuando pensaban que sus vástagos podían beneficiarse del desayuno escolar y de la tanda extendida, y permanecer bajo la vigilancia de la escuela.

Entonces, ¿qué queda?: la confianza quebrada de los miles de familias muy pobres ante el Gobierno que las abandonó; además, refugiadas en la precariedad laboral, y que no han podido lograr lo que se le dice que deben hacer: ¡¡ enviar los muchachos a las escuelas!!.