PARÍS.- Rafael Nadal insiste en que no puede saber con certeza si algún partido en Roland Garros podría ser el último en un lugar que ama, un lugar que es amado.

Por ahora, si sigue ganando y desempeñándose como lo hizo durante su monumental victoria en los cuartos de final sobre Novak Djokovic, que comenzó en mayo y finalizó en junio, Nadal tendrá más oportunidades de jugar.

Con una combinación de disparos brillantes y su resistencia característica, Nadal superó al campeón defensor del Abierto de Francia, Djokovic, 6-2, 4-6, 6-2, 7-6 (4) para acercarse un paso más a su 14° campeonato en el torneo de Grand Slam en tierra batida y lo que sería un 22° trofeo importante en general, sumándose a los récords que ya posee.

“Para ganar contra Novak, solo hay una manera: jugar lo mejor posible desde el primer punto hasta el último”, dijo Nadal. “Esta noche ha sido una de esas noches mágicas para mí”.

El partido comenzó poco después de las 9 p.m. del martes y concluyó más de cuatro horas después, después de la 1 a. m. del miércoles.