El Gobierno estadounidense, que gestiona en el Congreso la aprobación de 200 millones de dólares para apoyar el despliegue de una fuerza internacional, no quiere que lo dejen solo con el peso de la desafiante misión.

El consejero de seguridad, Jake Sullivan, no tardó en solicitar el refuerzo de otros países en apoyo a la misión que encabezará Kenia. Por ahora solo Jamaica, Guyana, Bahamas y Antigua y Barbuda han anunciado que aportarán tropas al proceso de pacificación en la vecina República.

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Es más que sabido que Kenia no cuenta con los recursos suficientes para cubrir los gastos que conllevará el despliegue de tropas en Haití.

Sullivan destacó que la colaboración de otros países es importante para ayudar a la Policía de Haití a combatir la violencia y la inseguridad en el vecino país.

Es obvio que sin colaboración la misión puede ser un verdadero fracaso.