La proliferación de vallas irregulares de promoción en las carreteras no solo atentan contra la seguridad de conductores y pasajeros de vehículos, sino que afectan el ornato, además de generar una sensación de desorden. No hay un tramo de una arteria en que no aparezca una valla de promoción de cualquier artículo o hasta abandonada por un candidato a cualquier cargo en campaña electoral.

La decisión del Ministerio de Obras Públicas y RD Vial de retirar los letreros publicitarios representa un aporte a la seguridad en las carreteras. Razón tiene RD Vial al señalar que la saturación visual resta seguridad a las carreteras y contrasta con la inversión para mejorar el medio ambiente. Sobra reconocer que las promociones, colocadas sin ningún criterio, constituyen elementos de distracción.

La iniciativa de las dos entidades tiene más trascendencia porque no solo procura eliminar la saturación visual, sino desarrabalizar el entorno de diferentes corredores viales, protegiendo la seguridad de conductores y pasajeros.

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Con la participación del Intrant, el Ministerio de Obras Públicas y RD Vial han eliminado letreros en Verón-Punta Cana, Los Manantiales y Cabeza de Toro en un operativo que se realiza por todo el país. Más auspiciosa no puede ser la iniciativa en beneficio de la población y del medio ambiente.