La causa que se cita de la explosión en una empresa de San Cristóbal que ha dejado 37 muertos y decenas de heridos pone sobre el tapete los grandes riesgos que suponen para la vida y la salud la ausencia de una eficaz supervisión laboral.

El cuerpo de bomberos de San Cristóbal establece en su informe que la tragedia se originó por la liberación de gases combustibles de metano y etileno generados por el sobrecalentamiento de plásticos en un espacio sin ventilación.

De ejercerse una efectiva supervisión sobre la seguridad y cumplimiento con las normas en la empresa es posible que la desgracia pudiera haberse evitado.

Más cuando según las propias autoridades ya en marzo en la firma Vidal Plast se había originado un incendio sin que se tomaran los correctivos de lugar.

Los propietarios de Vidal Plast, quienes fueron detenidos para fines de investigación, expresaron que desde la fecha del siniestro la empresa había cesado sus operaciones.

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En su informe los bomberos de San Cristóbal evidencian que la supervisión de las autoridades competentes brilló por su ausencia tras el siniestro que se había originado hace un tiempo en la empresa.