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Un muerto y 12 heridos en frontera Venezuela-Brasil

Un muerto y 12 heridos en frontera Venezuela-Brasil

CÚCUTA, Colombia (AP) — Las tensiones políticas en Venezuela se cobraron el viernes al menos una víctima. Una indígena murió al recibir un disparo y al menos 12 miembros más de su comunidad resultaron lesionados cerca de la frontera venezolana con Brasil tras enfrentarse con militares, en momentos en que la oposición buscara vías para ingresar alimentos y medicinas que el gobierno de Nicolás Maduro dice que no necesita el país y que ha prometido que bloqueará.

Emilio González, alcalde de la localidad fronteriza venezolana de Gran Sabana, identificó a la víctima como Zoraida Rodríguez, quien era parte de un grupo de indígenas de la etnia Pemón.

El enfrentamiento ocurrió un día después de que Maduro ordenara el cierre de la frontera con Brasil y el mismo día que la atención del mundo se ha dirigido a la frontera oeste de Venezuela con Colombia, donde se ha concentrado la mayoría de los alimentos y medicinas que se buscan entregar a la gente y el lugar en el que el viernes la oposición y el oficialismo realizan conciertos musicales paralelos a favor y en contra de la ayuda humanitaria.

El multimillonario británico Richard Branson patrocina un concierto que tendrá a decenas de músicos –incluyendo el astro colombiano Juanes– en un lado del cruce fronterizo que funcionarios colombianos han bautizado “Puente Unidad”, al tiempo que el gobierno socialista de Maduro ha prometido un festival de tres días llamado “Manos Fuera de Venezuela” en el otro lado.

“Si podemos llevar a la gente al espacio, ¿por qué es tan difícil sacar a la gente de la pobreza?”, dijo Branson al inicio del concierto en la ciudad colombiana de Cúcuta.

Aunque Maduro niega que haya una crisis humanitaria, el plan de la oposición para llevar ayuda a los venezolanos es el más ambicioso –y potencialmente peligroso– que ha intentado desde que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autodeclaró presidente interino el pasado 23 de enero.

Para llegar al concierto, docenas de venezolanos cruzaron hacia Colombia por una zona llena de arbustos y un arroyo, lejos del punto fronterizo regular. En el área no había soldados ni policías que impidieran su paso.

“Este concierto pasa una vez en la vida. Pobrecita la gente que se asolea, sin comida, sin trabajo. Tantas cosas que sufren, y ahora por fin tienen una alegría”, dijo Shirlet Durán, una venezolana de 19 años.

Reymar Perdomo, una migrante venezolana que se hizo famosa por un video que la muestra cantando, abrió el concierto con su canción más conocida: “Me fui”, que se ha vuelto el himno no oficial de los venezolanos que han huido de su país por la crisis económica.

Perdomo dijo que cantar tan cerca de su país le trajo malos recuerdos. “Hace un año y un poco más, crucé esta frontera donde robaron a mi equipaje y todo mi dinero”, dijo. “Pero en este momento sé que va a existir un cambio porque el venezolano así lo quiere y lo estamos demostrando”.

Posteriormente llegaron cantantes como el venezolano José Luis Rodríguez “El Puma” y la mexicana Paulina Rubio. Mientras, en el lado venezolano, trabajadores preparaban un escenario más pequeño para el concierto patrocinado por el gobierno de Maduro. Hasta después del mediodía, sin embargo, no se veía a ningún artista.

Mientras el torbellino político venezolano se prolonga, los aliados de Guaidó, que ha sido reconocido por medio centenar de países como el presidente legítimo del país, esperan que el concierto masivo y el esfuerzo por ingresar la ayuda marquen un punto de inflexión en el que se consolide un gobierno de transición. No obstante, Maduro no ha mostrado indicios de ceder.

“Pienso que uno de los objetivos del gobierno es confundir la situación, posiblemente crear algún tipo de caos que haga verse mal a la oposición”, dijo Phil Gunson, un analista del Crisis Group con sede en Caracas, sobre el concierto rival de Maduro. “Es una guerra de propaganda”.

Branson aceptó respaldar el concierto este mes tras ser contactado por Guaidó, Leopoldo López — un líder opositor bajo arresto domiciliario– y otros. El empresario colombiano Bruno Ocampo dijo que el magnate británico está tan comprometido con entregar la ayuda humanitaria a los venezolanos que va a quedarse en el lugar hasta el sábado para asegurarse de que la comida y los suministros médicos cruzan la frontera.

Branson se ha fijado como objetivo recaudar 100 millones de dólares en 60 días, siguiendo el ejemplo del concierto Live Aid de 1985, que recaudó fondos para aliviar una hambruna en Etiopía.

Seiscientas toneladas de ayuda, en su mayor parte proveniente de Estados Unidos, se encuentran desde hace dos semanas en un depósito en el llamado popularmente Puente Internacional Tienditas.

Mientras millones de venezolanos huyen del país, y los que se quedan sufren la escasez de alimentos y medicinas, Maduro sostiene que la ayuda es un complot del gobierno de Donald Trump para derrocarlo. El ejército ha colocado un camión cisterna y dos grandes contenedores sobre el puente para impedir el paso.

Días después de que Branson anunciara su concierto, el gobierno de Maduro dijo que no sólo realizaría su propio festival sino que entregaría 20.000 cajas de alimentos para colombianos pobres en Cúcuta el viernes y sábado.

Paola Quintero, una activista, dijo que mientras el concierto ha tenido un impacto positivo en Cúcuta, muchos están preocupados por lo que podría ocurrir el sábado cuando miles busquen llevar la ayuda a través de la frontera. “Cuando estén sobre el puente, cuando estén pasando las ayudas humanitarias, ¿qué espera a toda esa gente?”, dijo. “La preocupación es ésa”.

El Nacional

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