Cientos de personas de más de 20 sectores de El Tamarindo, en Santo Domingo Este, montaron ayer un piquete frente a las instalaciones de una envasadora de gas licuado de petróleo en la calle Mónica Mota, donde los propietarios han intentado abrirla unas 30 veces y la comunidad lo ha impedido. Afirman que hace cuatro años la empresa Credigas instaló los equipos e implementos de la envasadora de GLP, casi frente a una iglesia de Mormones, además próximo a donde el Gobierno construye una escuela básica de 24 aulas, y donde hay talleres de mecánica, colmados y cientos de residencias.
La denuncia la hicieron los dirigentes comunitarios Eridania Castillo, Johnny Melí, de las juntas de vecinos Margara II y Tamarindo Viejo II, Carlos Mossón, del club deportivo cultural Margara, y Máximo Canela, de la asociación de padres, madres y tutores de la escuela John F. Kennedy.
Dijeron que todos los permisos le han sido negados a Credigas para instalar la envasadora, incluyendo el Ayuntamiento Santo Domingo Este, el Ministerio de Medio Ambiente, el Cuerpo de Bomberos de Santo Domingo, el Ministerio de Industria y Comercio y la Defensa Civil.
Apuntan que un tribunal emitió una sentencia en la que ordena que la empresa Credigas retire los equipos que comenzaron a instalar. “Sin embargo, sus propietarios han intentado abrir la envasadora en dos ocasiones, pero la comunidad ha impedido su abertura”, indicaron los denunciantes.

