Higuey. Desde julio del 2012, nacionales y extranjeros, cuentan con un lugar, que más que un atractivo turístico, se ha convertido en un espacio para salvaguardar una gran parte del patrimonio cultural y religiosos de nuestro país.
Se trata del Museo de La Altagracia, con el cual se busca proyectar internacionalmente la gran devoción que existe en la República Dominicana por La Virgen de la Altagracia, quien es considerada la patrona de los dominicanos.
Esta importante edificación, diseñada por el arquitecto Pedro Borrell, se encuentra ubicado en los Jardines de la Basílica de Nuestra Señora de La Altagracia en Higuey, y viene a dar cumplimiento a una recomendación del Papa Juan Pablo II, el cual había insistido en la necesidad de realizar el inventario y catalogación del Patrimonio Histórico de la Iglesia, como herramienta para difundir y explicar el mensaje cristiano.
Este museo es una construcción moderna y minimalista de un solo nivel, diseñada en 1, 560 metros cuadrados. Durante una visita guiada a los medios de prensa, la directora de Turismo de Higuey, Yasmina Jiménez, señaló que con este espacio cultural se busca atraer la visita de más turistas a esta parte del país, y que los mismos conozcan más sobre esta virgen y los milagros que se la adjudican.
A su llegada al lugar, el visitante tiene la oportunidad de disfrutar de las seis salas de exposiciones acompañado de un guía que irá narrando la historia que envuelve a esta virgen.
En el recorrido se puede disfrutar de documentales y diversas obras de artes, entre ellos 16 óleos ovalados, pintados en el siglo XVIII por Diego José Hilaris. Cada una de estas pinturas, únicas en el país, narra diversos milagros hechos por la virgen.
Una de las imágenes más impactantes es la que cuenta cómo la virgen muestra su deseo de permanecer en Higuey, al desaparecer del cofre donde sería traslada desde Santo Domingo y aparece nueva vez en Higuey.
Uno de los espacios que más llama la atención es la “Sala de los Exvotos”, aquí se pueden ver las ofrendas dejadas por los creyentes en la Basílica, en agradecimiento a los milagros recibidos. Estas van desde humildes objetos hechos a mano hasta las más lujosas y caras joyas.
El Museo de la Virgen dentro de sus atractivos también tiene salas de exposiciones, multiuso y espacios que albergan muestras temporarias o itinirantes de arte sacro, artesanía y de géneros artísticos de alto contenido cultural.
Además en su vestíbulo cuenta con área de recepción, sala de espera y una tienda de arte y de recuerdos del museo.
