Salazar
Se lo buscó
El antiguo dirigente reformista, Humberto Salazar, se buscó su destitución como director ejecutivo de la Comisión de Reforma del Sector Salud desde que emplazó al ministro Administrativo de la Presidencia a aclarar si era quien financiaba una supuesta campaña contra el expresidente Leonel Fernández. Al perder de vista la jerarquía, se comportó, más que como un veterano dirigente político, como un novato.
Nadie lo va a considerar una víctima, sino un suicida. No es lo mismo denunciar irregularidades en el Banco Nacional de la Vivienda (BNV), las cuales, a propósito, no se han aclarado, que emplazar al ministro José Ramón Peralta a que aclare si utiliza fondos públicos para financiar una campaña contra el también presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
El presidente Danilo Medina, quien ha observado mucha ecuanimidad, no podía permitir tanto irrespeto, además de que se siembren dudas tanto sobre su Gobierno como contra uno de sus funcionarios más cercanos. Por todas las implicaciones que contiene el inaudito emplazamiento, el decreto para relevar a Salazar no se hizo esperar, pues era lo que mandaban los acontecimientos. Si Salazar lo que quería era irse del cargo pues le bastaba con renunciar antes que exponerse a la metedura de pata.