La brillante pesista Wanda Rijo no escondió su alegría tras subir los escalones que la condujeron ayer domingo a la exaltación del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano.
“Estoy muy contenta y feliz por este homenaje, incluso por esta exaltación hasta oré a Dios por ella”, dijo la medallista de oro en los Juegos Panamericanos celebrados en Winnipeg y Santo Domingo 2003.
Rijo, quien en la actualidad funge como pastora en la ciudad de La Romana dijo que: “Esta exaltación significa mucho para mí, ya que sirve de inspiración para la camada de jóvenes que me sigue”, acotó.
“Es bueno que la gente sepa que no me he desligado del deporte, a través de él he podido predicarle la palabra de Jesús a muchos jóvenes de nuestro país, algo que me llena de mucha alegría”, expresó.
La ganadora de tres medallas de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Maracaibo, Venezuela, dijo que gracias a su compromiso con el deporte hoy en día esta recibiendo los frutos de lo cosechado en cada una de sus competiciones.
“Yo amo el deporte, pero también amo la República Dominicana y con mucho orgullo puedo decir que a pesar de las altas y bajas que viví, hoy disfruto de cada semilla sembrada durante mi pasos por la halterofilia”, expresó la también medallista de plata del Campeonato Mundial de pesas celebrado en Georgia, Estados Unidos.
Por: Bienvenido Carmona jr bienvenidocarmona@gmail.com