Nueva York (AP).- Siete jugadores de los Cardenales de San Luis y otros seis empleados del equipo han dado positivo por COVID-19, lo que provocó que las Grandes Ligas pospusiera una serie de cuatro juegos que iban a disputar en Detroit.
La serie se iba jugar en el Comerica Park entre el martes y jueves.
Los Cardenales han estado en cuarentena desde el jueves en Milwaukee, donde la serie de San Luis el fin de semana fue pospuesta. El equipo se ha sometido a pruebas de diagnóstico todos los días.
San Luis no juega desde el 29 de julio en Minnesota y tentativamente podría retomar el calendario este viernes en casa ante los Cachorros de Chicago.
Los Cardenales son el segundo equipo de las mayores en verse afectado por un brote del nuevo coronavirus desde que la temporada se puso en marcha el 23 de julio.
Los Marlins de Miami deben volver a la acción el martes en Baltimore, luego de un brote en su expedición a Filadelfia que afectó a la mitad de sus peloteros.
Miami no juega desde el 26 de julio. Debido a que el brote fue detectado en el camerino visitante en el estadio Citizens Bank Park, los Filis han estado una semana sin jugar, al tiempo que se sometían a pruebas diarias.