Trabajé durante varios años con Anita Ontiveros como productora del programa Otra vez con Yaqui, en que hacia el montaje para televisión de las ideas propuestas por Yaqui y Dona Milagros Ortiz Bosch (la otra guionista junto conmigo).

La mirada de productora de televisión era afinada, certera, precisa. Era una generadora de ideas permanente y su papel como editora, era extraordinaria. Amaba su trabajo. Amaba este país. Amaba su gente. Amaba aquellos con quienes trabajaba.

Sus hijos, hace apenas un mes, habían solicitado al presidente Luis Abinader, que se le concediera en vida – y a pesar del estado en que estaba debido al Alzheimer avanzado falleció en su residencia la productora y directora de televisión Anita Ontiveros, quien desde hacía tiempo se encontraba afectada por el Alzheimer avanzado.

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En ese momento, la petición no pudo concretarse. Pero ahora que ha fallecido en la paz de su hogar, es el momento para reconocerla como se merece por parte del Gobierno, de modo que su aporte a la televisión, en la que se inició junto a su marido Horacio Lamadrid, con quien había llegado al país en 1967, procedentes de Argentina, para hacer televisión, comenzando con Domingo de mi ciudad, espacio dominical por Color Visión, de larga duración y que de alguna forma fue el precedente de El Gordo de la Semana, de Freddy Beras Goico y que tenía como productor a Carlos Bass, también argentino. Ontiveros se convirtió en la primera mujer directora, productora y camarógrafa en República Dominicana.

La más reciente edición del acontecimiento televisivo Imaginativa, de Edilenia Tactuk, fue dedicado a ella, pero fueron sus hijos los encargados de representarla, porque ella no estaba en condiciones de salud para asistir en persona.