California.– La familia de Britney Spears se encuentra en un delicado debate sobre cómo manejar la situación actual de la cantante, de 43 años, luego de que un video la mostrara tambaleándose a la salida de un restaurante en Thousand Oaks, California.
En las imágenes, Spears aparece con dificultades para mantenerse de pie, mientras una amiga intenta asistirla, y más tarde es captada conduciendo de manera errática, cambiando de carril y acelerando de forma peligrosa.
Estos episodios han despertado preocupación entre sus allegados, quienes temen que la artista esté mostrando señales de un posible deterioro en su estabilidad mental y emocional, recordando el periodo de crisis que vivió en 2007.
Familia considera medidas tras conducta preocupante de Britney
En aquel año, Spears perdió la custodia de sus hijos y fue hospitalizada en dos ocasiones, situación que derivó en la implementación de una tutela bajo la supervisión de su padre, Jamie Spears, que controló gran parte de su vida durante más de una década.
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Ahora, los familiares debaten si sería necesario intervenir nuevamente para protegerla de posibles riesgos, conscientes de que cualquier acción podría generar críticas públicas y revivir el debate sobre su autonomía y derechos.
«Necesita que alguien intervenga y la ayude. Lo que está ocurriendo recuerda exactamente a lo de hace 18 años«, declaró una fuente cercana a la familia al Daily Mail.
La preocupación se intensifica debido al distanciamiento de sus hijos, Sean Preston (20) y Jayden James (19), quienes han decidido alejarse tras presenciar episodios preocupantes durante las visitas a su madre.
Kevin Federline, exesposo de Spears, relató que sus hijos están «aterrados» y que uno de ellos le confesó tener miedo de que su madre pudiera morir.
Además, en su libro de memorias y entrevistas recientes, Federline describe comportamientos erráticos y peligrosos de Spears, incluyendo incidentes donde habría golpeado a uno de los niños y manifestado deseos negativos hacia ellos.
A pesar de la alarma familiar y mediática, Britney Spears y su equipo legal han rechazado categóricamente las acusaciones. La cantante denunció el comportamiento de Federline como «gaslighting» y reafirmó que su prioridad es el bienestar de sus hijos.
La situación actual refleja un delicado equilibrio entre la preocupación familiar, la protección de la artista y la salvaguarda de su autonomía personal, mientras los allegados evalúan cuidadosamente los próximos pasos a seguir.

