Justo y solidario
Señor director:
El único virtuoso es Dios, pero hay personas que con sus acciones justas, solidarias y humanitarias se acercan a él, y en honor a la verdad abundan los testimonios de que Radhames Gómez Pepín, en vida, hizo gala de esos adjetivos que enaltecen el alma de quienes los practican. De lo justo y solidario que era puedo dar testimonio fiel y le refresco la memoria a quienes igual que él me apoyaron de principio al fin de mi vía crucis, por culpa de un politiquero y funcionario medio de Educación, porque en nuestro país cualquier yuca con corbata lo es, máxime en los gobiernos del PLD.
Cuando inicio el primer gobierno peledeista era sub-directora de la escuela Republica de Honduras, pero ascendieron al director a Director del Distrito y por escalafón me tocaba la dirección del plantel, pero el Director Regional me pidió que le cediera esa oportunidad a un profesional de la educación muy bueno y acepte ceder el puesto. Ese profesor duro poco tiempo dirigiendo y otra vez me toco el ascenso y el Director Distrital me designo interinamente, y todos felices en la escuela, pero la alegría nos duró menos que una cucaracha en un gallinero, porque el regional no me quería en la dirección (parece ser entendía que la escuela era su casa) y ese titiritero y sus títeres me sometieron a un acoso bárbaro.
A un amigo de infancia y periodista que laboraba en El Nacional le narré la zozobra en que me tenían, y me dijo, habla con Radhames para que te ayude con ese problema. Lo hice, me escucho sin interrumpirme y me sugirió escribir lo que me hacían, y seguir trabajando sin preocuparme porque no me iban a sacar.
Trabaje los 4 años del PLD más los 4 del PRD y salí por la puerta que entre, jubilada, satisfecha del deber cumplido y agradecida de ese gran ser humano y periodista, y de esa inolvidable comunidad educativa.
A sus familiares, compañeros de labor y a sus amigos le digo, que del aguijón de la carne, del dolor, de la muerte y el luto nadie no puede librar, y plena conciencia deberíamos tener de que lo único imperecedero es el amor, que más allá de la vida les manifestamos a nuestros parientes y amigos. Que Radhames Gómez Pepín descanse en la paz del Señor y consuelo a sus familiares e incluyo al equipazo de El Nacional (La Voz de Todos) integrados por comunicadores y demás empleados, cuya tristeza es inocultable por la pérdida de su jefe.
Atentamente,
Lic. Teresa Gómez.