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Ciudades domesticadas

Ciudades domesticadas

Eduardo Álvarez

Una ciudad domesticada es siempre amable. Amigable en tanto soportable.  Y por más extensa y poblada que sea, se reduce ante ti llena de encantos. Te acostumbras a la vista y a su compañía.

Las asperezas que puedas encontrar en ellas se quedan aparte en el asfalto de los autos. En todo caso, las grandes ciudades son lugares, primero, domados por el hombre, para hacerlos habitables. Nacen, crecen y se desarrollan, pero no todas son domesticadas, diseñados al servicio y agrado del individuo, de la familia y la sociedad. Doméstico es lo de casa, no lo olvides. Y nada como estar en casa.

Es en este punto donde debemos establecer la notable y significativa diferencia entre lo domado y lo domesticado. En lo primero, se pierde el carácter salvaje y silvestre de la naturaleza donde no ha tocado la mano del hombre.

Mientras que en lo segundo, el proceso de urbanidad consigue organizar la vida y el trabajo en comunidad evitando que las obras de servicio y el progreso físico constituyan un retorno a ese inhóspito salvajismo que habíamos dejado atrás al momento de fundar el sitio que, con el tiempo, ha devenido en una enorme ciudad.

Explicado es sencillo de entender. Mas complejo pero útil y necesario a la hora de aplicar fórmulas que preserven el carácter amable en  los aspectos que todos, de una manera u otra, buscamos en los lugares que habitamos o visitamos. De ahí el atractivo que conservan grandes urbes a pesar de su crecimiento.

El tema tratado ha sido objeto de estudios, desde luego. Lo cual se facilita a posteriori, debido al proceso natural, espontáneo acaso, que se da en la formación estos lugares concéntricos tan comunes en Europa    No por ello, exclusivos de ese continente.

Asia y América tienen buenas muestras. Donde caminas por sus calles, atrapado en el paisaje y seducido de asombro, donde el lujo y la sencillez se dan la mano y te reciben en un cálido abrazo. Fuerte abrazo que solo proviene de la gente, la misma que anda y desanda en las calles.