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Ciudades verdes

Ciudades verdes

Alberto José Taveras

Si hay un lugar donde plantar árboles tiene una función especial es en la zona urbana, tomando cada vez mayor importancia el concepto de las ciudades verdes.

Dichas ciudades son aquellas donde abundan los espacios naturales para disfrute de sus ciudadanos, bajas emisiones de gases efecto invernadero, bajos niveles de contaminación acústica, caracterizadas por edificaciónes bioclimáticas y sostenibles, donde sus habitantes están educados en el respeto al medio ambiente.

Hoy en día más de 4,300 mil millones de personas en todo el mundo viven en áreas urbanas y se calcula que para el año 2050 esta cifra superará los 7 mil millones.

Se estima que las ciudades del mundo consumen el 75% de los recursos naturales y producen entre el 60 y el 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero.

Uno de los componentes principales de este concepto es la vegetación, tanto en espacios públicos como en las viviendas, orientado a crear un bosque urbano. La vegetación estará presente tanto en las áreas comunes, superficies verticales y en cubiertas.

Utopía convertida en realidad
También en áreas dedicadas al coworking, instalaciones deportivas y espacios de ocio, jardines colgantes y puentes peatonales. Otro de los elementos esenciales de las ciudades verdes es la edificación bioclimática y sostenible, edificios integrados en el entorno, cuyo impacto al mismo sea mínimo y estén construidos con materiales sostenibles o reciclados, evitar los tóxicos y contaminantes químicos.

En cuanto al uso de recursos naturales estas edificaciones deberán caracterizarse por un bajo consumo y en base a energía sean renovables. El aislamiento térmico es otro requisito para este tipo de construcciones ya que puede suponer un ahorro de energía entre un 60% y 90%.

Un ejemplo famoso de este tipo de arquitectura es el edificio Tao Zhu Yin Yuan, en Taiwán, que es un complejo residencial que incluye la plantación de 23.000 árboles y arbustos que según estimaciones, las plantas podrían absorber hasta 130 toneladas de emisiones de dióxido de carbono cada año.

Este modelo de ciudad promueve un balance entre el tejido urbano y los espacios verdes, disfrutando de los beneficios del contacto con la naturaleza.

Contempla huertos urbanos, cubiertas ajardinadas y otras soluciones basadas en la naturaleza, que son propuestas para conseguir la sostenibilidad en esa idea utopía convertida en realidad y necesidad que son las ciudades verdes.