Santo Domingo.– El Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE) emitió una Carta Pastoral en la que hace un llamado a la nación dominicana a reflexionar y actuar con responsabilidad frente a los desafíos económicos, sociales e institucionales que enfrenta el país de cara al año 2026.
El presidente de la entidad, Feliciano Lacen Custodio, señaló que la coyuntura actual exige “discernimiento, transparencia y visión de futuro”, al tiempo que subrayó el compromiso de las iglesias evangélicas con el fortalecimiento del bien común, la justicia social y la convivencia pacífica.
“Como comunidad de fe, entendemos que nuestra voz debe contribuir al fortalecimiento del bien común, la justicia social y la convivencia pacífica, exhortando a las autoridades y a todos los actores nacionales a actuar con sentido de nación”, expresó Lacen Custodio.
En el ámbito económico, CODUE manifestó su preocupación por la desaceleración del crecimiento, el elevado endeudamiento público y el aumento sostenido del costo de la vida, factores que, según indicó, impactan de manera directa a los sectores más vulnerables.
El alza de los precios de los alimentos y la pérdida del poder adquisitivo, advierte la entidad, generan “angustia e incertidumbre en miles de familias dominicanas”.
Respecto a la seguridad ciudadana, el consejo evangélico citó estudios de opinión que colocan la delincuencia y la violencia como el principal problema percibido por la población, por encima de temas como la corrupción o la migración, lo que a su juicio demanda políticas públicas “más firmes, preventivas y humanas”.
Puedes leer: Iglesia Católica plantea al 2026 como una oportunidad para renovar valores
CODUE también expresó inquietud por la calidad de los servicios públicos, en especial en salud y educación, reiterando que esta última debe ocupar un lugar central en la agenda nacional, no solo desde el punto de vista presupuestario, sino como una política integral orientada a la formación en valores, la empleabilidad y la cohesión social.
En su pronunciamiento, la organización alertó además sobre el impacto de la debilidad institucional y los casos de corrupción en la confianza ciudadana, señalando que la falta de respuestas oportunas del Estado ante situaciones críticas “profundiza la desconfianza social y pone en riesgo la estabilidad democrática”.
Como parte de sus orientaciones pastorales, CODUE planteó la necesidad de incentivar la agricultura familiar y hogareña para fortalecer la seguridad alimentaria, así como continuar apoyando el aparato productivo nacional mediante inversiones en caminos vecinales y el pago oportuno a los productores.
Sobre la migración, reconoció que se trata de un fenómeno “sistémico, cíclico y estructural”, y reafirmó la importancia de cumplir la Ley 285-04 y los protocolos vigentes, fortaleciendo la vigilancia fronteriza con tecnología, pero “siempre con respeto a la dignidad humana y a los derechos fundamentales”.
Puedes leer: Aguaceros y tormentas: lo que traerá el tiempo este fin de año, según Indomet
En cuanto a la seguridad ciudadana y la reforma policial, CODUE consideró fundamental dar continuidad a los programas existentes, promoviendo una integración multisectorial que involucre al Estado, las comunidades, las iglesias y la sociedad civil.
En su mensaje final, el consejo evangélico destacó la resiliencia histórica del país y el valor del clima de paz y estabilidad democrática, al tiempo que reafirmó su confianza en las oportunidades de la nación rumbo a 2026.
“Caminando juntos como nación, con fe, responsabilidad y compromiso, es posible avanzar hacia un futuro de mayor justicia, desarrollo y esperanza para todos”, concluye el documento, exhortando a mantener los valores fundacionales reflejados en el lema nacional: “Dios, Patria, Libertad”.

