En medio de un tercer rebrote, y justo cuando se discute la obligatoriedad de las vacunas, las autoridades sanitarias detienen la vacunación masiva, para dar preferencia solo a los que ya tienen una dosis. La realidad es que no hay suficientes vacunas, y la decisión de aplicar las vacunas Pfizer solo a los jóvenes de 12 a 18 años nos parece desconcertante.
Ante un rebrote y escasez de vacunas, es menester buscar estrategias para optimizarlas. La primera y segunda dosis de Sinovac confieren 3% y 53% de efectividad, respectivamente: por tanto, se justifica priorizar una segunda dosis, que, si bien no ofrece la máxima protección para prevenir los contagios, reduce los casos graves y de fallecimientos, —siempre y cuando no se desborde el sistema sanitario—
Para mantener el entusiasmo de la población con el proceso de vacunación, invitar a los grupos de riesgo y mayores de 60 años (sin vacunar) para ser inoculados con una dosis de Pfizer, que proporciona un 74% de efectividad. (Los más jóvenes pueden esperar).
Ahora que Estados Unidos y Europa se acercan a su cobertura deseada, son mayores las probabilidades de recibir frecuentemente, vacunas eficaces y de más bajo costo. En lo adelante, no será necesario detener el proceso para garantizar una segunda dosis, ya que, con una sola dosis, la protección es alta. (Con dosis llega hasta 95%).
Atendiendo a la baja efectividad de sus vacunas para prevenir los contagios, los científicos chinos recomendaron: Aplicar una tercera dosis de su vacuna, y/o una dosis de vacuna de diferente marca. Estudios realizados en Reino Unido y España demuestran que la combinación de vacunas AstraZeneca y Pfizer, es altamente efectiva, se esperan resultados de estudios en Hong Kong y Filipinas combinado la vacuna Sinovac con otras marcas.
Algunos países árabes que tienen altas coberturas con vacunas de fabricación china, y cursan por una nueva ola epidémica, ya se han adelantado a los resultados, aplicando a su población, una segunda o una dosis de refuerzo de vacunas de diferente plataforma.
Si la situación de escasez global y local de vacunas persiste, debemos reconsiderar el exigir a la población un carnet de vacunación actualizado. Por otro lado, corresponde a nuestras autoridades sanitarias, investigar y tomar una decisión sobre la combinación de vacunas.
Por. Ernesto Guerrero
guerrerocamiloe@gmail.com