Estos tiempos de transparencia requieren que el Ministerio de Educación explique con meridiana claridad las razones por las que se permite que en uno de los cuadernillos utilizados en la educación de alumnos de secundaria se incluya juicios de valor ofensivo para Cuba, Nicaragua y Venezuela.

Un artículo insultante, escrito por un tal Carlos Sánchez Berzain, quien afirma que estos tres países se aprovechan de la pandemia del coronavirus para lucrarse.

En razón de que se trata de un cuadernillo que cuenta con la anuencia oficial para ser usado como material educativo, es de suponer que el ministro de Educación y su equipo técnico comparten el tipo de señalamiento político que expone el tal Sánchez Berzain.

Por si no lo sabían las autoridades educativas, el Estado dominicano se sustenta en el principio de autodeterminación de los pueblos, por lo que no es dable patrocinar ningún tipo de intervención política, militar, económica o ideológica que vulnere ese mismo principio en otras naciones.

Se ha dicho que el cuadernillo insultante fue donado por una agencia extranjera, lo que sin dudas agrava la falta imputable al Ministerio de Educación, que debió revisar los originales de ese texto antes de colocarlo en los anaqueles de la escuela dominicana.

Lo menos que puede decirse de todo lo ocurrido constituye un motivo de indignación y vergüenza a la patria de Duarte ante la ofensa cometida contra los pueblos de Bolívar, Sandino y Martí.