Con el desarrollo de una campaña electoral sin incidentes mayores, durante la cual los ciudadanos expresan libremente su respaldo a candidatos y partidos, la sociedad envía un claro mensaje a autoridades y clase política sobre su firme determinación de sufragar el domingo en elecciones libres, limpias y concurridas.

Con su ferviente ejemplo de civismo, la población se ha ganado el derecho de que Gobierno, partidos y autoridades electorales garanticen que el proceso comicial transcurrirá en santa paz, sin ningún tipo de contaminación.

Desde el momento en que la Junta Central Electoral (JCE) anunció el inicio formal de la contienda electoral, la ciudadanía en sentido general ha tenido un comportamiento admirable, comparable con el asumido en este tipo de proceso por las naciones con mayores niveles de desarrollo humano.

Es preciso insistir en que las lamentables muertes a balazos de dos dirigentes del PLD y uno del PRM ocurrieron durante incidentes suscitados entre miembros de esos partidos, sin que esas tragedias puedan ser imputadas a la campaña electoral propiamente dicha.

Las direcciones nacionales y locales de los partidos se asignan de mutuo acuerdo para no coincidir en los lugares donde realizan caravanas, encuentros, mano a mano o cualquier otro tipo de actividad proselitista, loable señal de consenso y convivencia, que debería extenderse a todos los niveles de confrontación o competencia.

Quienes compiten por el favor del voto ciudadano deberían saber que el mundo no concluirá el domingo con las votaciones para elegir presidente, vicepresidente, senadores, diputados, alcaldes y regidores. A pesar de unos y otros, la vida continuará su agitado curso. Unos ganan, otros pierden. De eso se trata.

Diario Libre

Diario Libre festeja sus 15 años de existencia, trascendente efeméride que demuestra que República Dominicana posee una prensa fuerte, dinámica, moderna, activa, valiente y competente.

El Nacional se une al regocijo del diarismo nacional por el cumpleaños de Diario Libre, al tiempo que felicita muy calurosamente a su director, Adriano Miguel Tejada, y a todo su personal.