El alcalde electo Manuel Jiménez, hizo un conjunto de propuestas a Alfredo Martínez (El Cañero), actual síndico de Santo Domingo Este, con la finalidad aunar esfuerzos para contrarrestar el coranavirus, empezando por la limpieza de la localidad, en cuyos sectores se observan vertederos improvisados de basura en cada esquina.
En ese sentido, Jiménez plantea a Martínez intensificar la recogida de desperdicios sólidos para evitar su acumulación y el surgimiento de brotes epidémicos. De igual forma, sugiere solicitar al presidente declarar en cuarentena por 14 días al municipio y que las instituciones gubernamentales, entidades empresariales y de la sociedad civil, garanticen asistencia de salud y medios durante ese período.
Asimismo, el alcalde electo propone que el Ministerio de Salud tome el control de todos los centros públicos y privados, dotándolos de pruebas del virus como medida para contrarrestar la pandemia. También realizar un operativo de desinfección de todos los sectores, bajo la supervisión de infectólogos, epidemiólogos y profesionales de medio ambiente, así como la difusión de mensajes educativos por los medios de comunicación y las redes sociales.
Al momento de escribir estas líneas el señor Martínez no había dado respuesta al alcalde electo, a pesar de que ambos acordaron, en una reunión reciente, trabajar en conjunto, tal y como lo establece el protocolo del proceso de transición. Es una pena que Manuel Jiménez tenga que esperar el día 24 del presente mes para la toma de medidas que pudieron aplicarse mucho antes. Es la salud del municipio más grande del país que está en juego.
La pandemia de coronavirus tiene de rodillas a la humanidad y demanda de la unión de todas las naciones. Y en cada nación es necesario el concurso y la participación de todos su conciudadanos, en la lucha contra esta tragedia, sin miramiento de razas ni creencias religiosas y políticas.
Sin embago, no constituye un secreto que el país tiene la mayor tasa de mortalidad por coronavirus, todas las acciones se politizan y desde el gobierno se le ha prohibido a la oposición hacer donaciones encaminadas a salvar vidas. Y al Cañero se le plantea la oportunidad de hacer algo antes de irse y se hace el loco.
