El ministro de Hacienda advirtió que el Estado dominicano no tiene que protegerle mercados a nadie, con lo que mostró su oposición a que se mantenga el privilegio de la territorialidad en la instalación de negocios y en el caso particular de los combustibles a que no se permita que en un mismo establecimiento se vendan combustibles de origen fósiles y gaseosos.
Donald Guerrero dijo que la función del Estado es regular, establecer reglas claras y hacer que las normativas se cumplan.
Hizo el comentario al ser cuestionado en relación a la pretensión de tradicionales participantes en el mercado del gas licuado de petróleo de que se prohíba la comercialización de ese carburante en las mismas estaciones en las cuales se comercializan otros combustibles como gasolina y gasoil.
Recordó que con anterioridad existía una normativa en la cual a comercios como las farmacias, se les estableció un territorio en el cual no se podía instalar un negocio igual. Opinó que se trataba de una protección a ese negocio por parte del Estado, que no es su función.
“Dos negocios pueden estar uno al lado del otro, eso es competencia”, dijo, al reiterar su planteamiento de que está de acuerdo en que se comercialicen en un mismo establecimiento combustibles diversos, siempre que se cumplan con las normas de seguridad.
Sin magia
Guerrero afirmó que el desempeño de la economía del país, incluyendo el incremento en casi tres puntos porcentuales del PIB de la presión tributaria no se ha logrado con magia, sino con eficiencia, dándole instrumentos adecuados para hacer su trabajo a las agencias recaudadoras estatales y manejando los recursos públicos con eficiencia y eliminando gastos que no eran necesarios.
Dijo que ha sido un esfuerzo enorme el realizado por las direcciones generales de Impuestos Internos y Aduanas para compartir información, así como realizar auditorías conjuntas para enfrentar una evasión fiscal que en el caso del impuesto a la transferencia de bienes industrializados y servicios supera el 40 por ciento y en el impuesto sobre la renta que deben pagar las personas físicas es de un 57 por ciento y en el caso de las personas jurídicas supera el 60 por ciento.
Por ello, fue que el Gobierno de Danilo Medina tomó la decisión de no auspiciar un pacto fiscal en el entendido de que había espacio para aumentar las recaudaciones sin necesidad de modificar las tasas impositivas vigentes. Eso se logró a través de la implementación de diversas normas que han permitido que desde el 2012 la presión tributaria se incrementara en casi tres puntos. Incremento que de acuerdo al ministro de Hacienda “no es suficiente”.
Los comentarios del ministro de Hacienda fueron realizados en su participación ayer en el almuerzo semanal de los medios de comunicación del Grupo Corripio. Donde participó acompañado de los viceministros del Tesoro, Rafael Gómez y de Políticas Tributarias, Martín Zapata, así como del asesor Económico, José Luis Actis y Financiero, Richard Medina, así como la directora de Comunicaciones, Kleiner López.
Deuda
El ministro de Hacienda afirmó que pese a los pronósticos apocalípticos de economistas y entidades nacionales, la deuda del país es manejable y sana.
Dijo que la deuda total del país asciende a 31 mil 544 millones de dólares, equivalente a un 40 por ciento del PIB, pero que ella hay un porcentaje que corresponde a deuda intergubernamental, otro porcentaje corresponde a deuda contraída en pesos, por lo que la deuda real en dólares es 21 mil 400 millones, un 27 por ciento del PIB, pero a una tasa promedio de 5.6% y un periodo promedio de vencimiento de 10 años, “que a los ojos de los inversionistas es una composición sana”.
UN APUNTE
Combustibles
El ministro de Hacienda afirmó, en respuesta a reclamos de diversos sectores que piden una reducción de los impuestos a los combustibles, a través de la modificación de la Ley de Hidrocarburos, que esto no es posible, debido al impacto que tienen en los ingresos fiscales.
