Santo Domingo.- Los aprestos para la discusión de los pactos fiscal y eléctrico iniciarán el próximo lunes con una reunión de la dirección del Consejo Económico y Social (CES), informó ayer Rafael Toribio.

El anuncio de los trabajos del CES se produce luego de que el presidente Luis Abinader informara, el pasado jueves, la intención del Gobierno de asumir las firmas del pacto eléctrico en los próximos seis meses y el pacto fiscal en un proceso que deberá concluir en 2022.

Lograr ambos pactos es un reto, ya que el último intento para concertar estas firmas se realizó a finales de 2018 y principios de 2019.

En ese momento, aunque el Consejo Económico y Social había anunciado que había más consensos que disensos, el sector social, los industriales de Herrera y partidos políticos, como Alianza País y el Partido Revolucionario Moderno (PRM), ahora en el poder, se negaron a su firma.

Cuando era oposición, el PRM condicionó su firma a que se derogara cualquier decreto o disposición que violara la Ley de Electricidad, que se reestructurara el compromiso de eliminar, en 18 meses, el problema de los apagones, la realización de auditorías a las distribuidoras y a que se aplicara un programa de reducción de gastos.

El PRM pedía establecer un programa de licitaciones para la contratación de energía, con transparencia, que se eliminen los contratos grado a grado, aplicar un sistema de tarifa social transparente acorde con la población de más bajos recursos, y que no se produjeran alzas en la tarifa hasta que las distribuidoras redujeran los gastos operativos al 10% de sus ingresos.

Mientras que la Asociación de Empresas Industriales de Herrera (AEIH) aseguraba la firma de este pacto no resolvería el problema energético dominicano y denunciaba que no se acomodaba a los intereses de algunos sectores, dejando problemas fundamentales sin resolver.

Un apunte

El diálogo

El Consejo Económico y Social inició las discusiones en enero de 2015 con un plazo de seis meses para ser firmado, el pacto eléctrico duró tres años en debate y luego de la búsqueda infructuosa del compromiso de los partidos políticos, su firma fue suspendida definitivamente en febrero de 2019.

Ahora el anuncio del presidente Abinader para que se inicien las conversaciones crea nuevas expectativas.