La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) ofrecerá respaldo técnico a la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) para la aplicación de una encuesta sobre el “uso del tiempo”, insertada en el próximo censo nacional, lo que permitirá que se evalúe esa variable como un activo vinculado a la economía, mercado laboral y ámbito familiar.
El tiempo, medido a través de las manecillas del reloj o el calendario anual, ha sido como un valor intangible desperdiciado por gobiernos y sociedad, como afluente que confluye al mar, sin ser represado para su aprovechamiento continuo o programado.
Economías florecientes planifican el desarrollo en todos los órdenes dentro de ineludibles periodos de días, meses o años, con la ejecución de cada tarea en absoluta armonía entre espacio y plazo, sin lugar para improvisaciones, algo que se ha intentado instituir sin mayores éxitos en República Dominicana.
La construcción de la Muralla China y la apertura de la “Ruta de la Seda”, conllevaron arduo trabajo a cargo de varias generaciones del pueblo chino, pero aquí es costumbre pretender vivir de lo comido por lo servido, en una dilatada cultura de improvisación.
En 2012, se instituyó la Ley de Estrategia Nacional de Desarrollo 2030, mediante la cual Gobierno, Estado y sociedad definieron qué país desean tener para ese año y cuáles serían las mejores vías para lograrlo, al amparo de lo cual se consensuaron un conjunto de obras de infraestructura e institucionales que deberían ser concluidas en un plazo de 18 años.
No se sabe si el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo ha enumerado o identificado las obras que han sido iniciadas o concluidas en virtud de ese programa de desarrollo, que sería ejecutado durante cuatro periodos de gobierno y los primeros dos de una quinta administración.
Al tiempo no se le confiere su justo valor a nivel del Estado, empresarial, familiar ni individual, porque erróneamente se considera un bien inagotable o reemplazable, sin que se pueda entender que es imposible abrevar más de una vez en las aguas de un mismo río.
Se resalta como altamente positivo la asistencia técnica que brindará la Cepal para que en el próximo censo nacional se incluya una encuesta sobre uso o dispendio del tiempo, el más valioso de los activos al que puede acceder el género humano, que aquí se pierde como agua entre las manos.