Con uno que se cita entre los principales cabecillas de la supuesta red relacionada con las 9.8 toneladas de cocaína decomisadas en el multimodal Caucedo ha aflorado un escabroso enigma.
Resulta que tras ser extraditado en 2016 desde Colombia, acusado de narcotráfico y asesinato, en 2018 José Nicolás Castillo Hart fue beneficiado con un “no ha lugar” por el Quinto Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional.
Lo que ocurrió en torno al proceso tendrá que determinarse a través de una investigación que la procuradora general de la República, Miriam Germán Brito, se supone que debe ordenar.
Es muy suspicaz que no prosperara el proceso contra un acusado de ultimar en 2011 al sargento del Ejército, Raymond Toribio García, además de pertenecer a una supuesta estructura del narco en el este. Es posible que no sea el único enigma a despejarse.