¿Qué Pasa?

Entre el cielo y tierra

Entre el cielo y tierra

Mary Leisy Hernández

Los 108 de Pepe
Santo Domingo. RD. Tiene 108 años y aún me recuerda por mi nombre, me cuenta historias que vivió de joven con mi padre y me habla con plena coherencia de aquel día que por casualidad nos encontramos caminando por las calles de Nueva York.

Que me recuerde a pesar de durar tiempo sin vernos me llena de gran satisfacción, aunque por lo visto no solo a mí me recuerda. Parece haber olvidado poco de todo lo vivido y así lo demuestra al mencionar con entusiasmo personajes y hechos de diferentes períodos. Hablar con él es como ver un vídeo del ayer e imaginar cómo era aquella época en la que, según dicen, “los perros se amarraban con longaniza”.

Siempre me ha parecido muy grato conversar con personas muy mayores, sobre todo con aquellos que les gusta contar historias de sus años mozos como lo hace don Pepe Chalas, un hombre que aun muestra energía y entusiasmo. Hace relativamente poco tiempo que cultivaba la tierra y se le veia caminar con pecho erguido por las calles de Cotuí y zonas aledañas.

Participé en su 101 aniversario y lo vi bailar con cuanta mujer estuvo en la fiesta incluyéndome a mí.
Este mes está de cumpleaños y como siempre, imagino que habrá fiesta. Cómo no festejar el regalo de tener a un ser querido por tantos años y de tan especial manera. Son pocos los que llegan a esa edad y sobre todo, los que llegan con la actitud de este señor que en otros tiempos fue autoridad en su comunidad.

Cada vez que voy a mi patria y mi pueblo, me incitan ir a ver a mi amigo Pepe, con el temor de que sea la última vez. Yo, por el contrario, confío que volveré a verlo en muchos viajes de regreso.
Feliz cumpleaños mi compadrito. Nos vemos en la próxima.

El Nacional

La Voz de Todos