WASHINGTON – Los Nacionales esperaron más de un año y medio para jugar béisbol frente a su público local, además de otros cinco días después de que se pospusiera su primera serie de 2021 debido a los resultados positivos de la prueba covid-19.
En el partido inaugural de la temporada el martes contra los Bravos, dieron un espectáculo con una victoria por 6-5 que culminó con el primer hit de Juan Soto para terminar juego en las Grandes Ligas y una gran celebración alrededor del Nats Park.
“Siempre hay una narrativa en cada juego”, dijo el lanzador abridor Max Scherzer. “Tuvimos algo de adversidad, lo enfrentamos y jugamos bien por eso”.
Los Nacionales salieron al campo con un roster muy editado de 26 hombres, luego de que 10 jugadores comenzaran la temporada en la lista de lesionados, incluidos dos receptores (Alex Avila y Yan Gomes), un primera base titular (Josh Bell), un segunda base titular (Josh Harrison), un jardinero izquierdo titular (Kyle Schwarber), dos zurdos titulares (Patrick Corbin y Jon Lester) y un cerrador zurdo (Brad Hand).
También tendrían que compensar un déficit temprano, luego de que Scherzer permitió cuatro jonrones en solitario en las primeras tres entradas. Eso no es nada insuperable para un equipo acostumbrado a superar obstáculos, especialmente para Scherzer, quien se mantuvo en la pelea, encontró un ritmo y retiró a 12 de sus últimos 13 bateadores.
“Estoy orgulloso de los muchachos, lucharon todo el partido”, dijo el mánager Dave Martínez. “No se rinden. … Van a jugar duro durante nueve entradas, y lo viste esta noche”.
Aunque escasos de jugadores, los Nacionales se vieron impulsados por la emoción y la energía de 5,000 fanáticos, los primeros en llenar los asientos de la marina dentro de Nats Park desde el Juego 5 de la Serie Mundial 2019.
La tarde comenzó con muchas de las ceremonias previas al juego programadas originalmente, incluido el izamiento de la bandera del campeonato en Center Field Plaza, fuegos artificiales durante las presentaciones de la alineación inicial y la presentación a Soto del título de bateo de la Liga Nacional 2020 y los premios Silver Slugger. La multitud estaba allí, vitoreando todo el tiempo para ayudar a los Nacionales a dejar atrás la semana pasada.
“Por eso jugamos, es para jugar frente a estos chicos y chicas y tratar de conseguir la victoria no solo para nosotros, sino para ellos”, dijo Trea Turner.
Entonces, cuando Soto se encontró en el plato en la parte baja de la novena con dos corredores y sin outs en un empate 5-5, canalizó el rugido de los fanáticos. Soto trabajó para un conteo de 3-0 contra Will Smith, y luego envió un sencillo en línea al jardín central, conduciendo a casa a Victor Robles desde la segunda base. También llevó a Nats Park a un frenesí. Aparentemente improbable con todos sus logros anteriores, fue el primer hit de oro de Soto en Grandes Ligas.
“No puedo creer las últimas entradas con el ruido y la multitud, simplemente hizo que mi corazón se acelerara un poco”, dijo Soto. “Se siente bien sentir eso y estar de regreso en el campo con los fanáticos y todo. Es una sensación increíble jugar frente a un grupo de personas que te animan”.
Hace una semana, los Nacionales planeaban abrir su temporada el jueves contra los Mets. Estaban planeando finalizar una lista que se formó sin problemas en los Entrenamientos de Primavera. Planeaban mantenerse al día con los entrenamientos y los regímenes de entrenamiento que habían planeado en el campamento.
Casi nada de eso salió según lo planeado, pero escribir un sencillo memorable en el noveno para la primera victoria de 2021 tampoco fue parte del guión.
“Para mí, fue muy emotivo”, dijo Martínez sobre el martes. “Terminó muy, muy bien”.
