El caso de Julio de los Santos Bautista (Julito Kilo) revive las incógnitas que rodean la lucha contra el narcotráfico en el país.

Al anunciar su captura durante un allanamiento en su residencia de Playa de los Muertos, San Pedro de Mcorís, las autoridades dijeron que se trataba de uno de los principales cabecillas de una poderosa red de narcotráfico en el este.

En otro operativo en una villa en Juan Dolio fueron detenidas dos personas a las que se ocuparon 88 kilos de cocaína, armas de guerra, vehículos de lujo.

En abril de 2019 el apodado Julito Kilo fue detenido con cinco armas de fuego, pero fue liberado sin mayores explicaciones varios días después. De sus movimientos nada se sabía hasta que volvió a ser apresado.

La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) tiene que dar más información para trascender el golpe de efecto de la detención y del historial criminal que le atribuye.

Su prontuario recuerda el caso de César el Abusador, quien escapó de las narices de las autoridades durante un aparatoso operativo.

No se sabe mucho de Julito Kilo, pero sí es obvio que no se puede operar un imperio como el que se le atribuye si no se cuenta con el respaldo de alguna importante autoridad.