Las pymes

Una cosa, por lo visto, son las buenas intenciones del presidente Danilo Medina a favor del desarrollo de las micro, pequeñas y medianas empresas, y otra la realidad. Pese al decreto  164-13, que obliga a las instituciones a adquirir en ese sector los bienes y servicios que necesiten, así como a la eliminación del cobro del anticipo del 18% del itebis, su conversión en sujeto de crédito y toda la alharaca, representantes de diferentes entidades coinciden en que las “trabas burocráticas” constituyen un pesado obstáculo para la supervivencia de sus miembros.

Al participar en el Almuerzo de los Medios de Comunicación del Grupo Corripio, los empresarios presentaron un cuadro sombrío. A tal punto que temen que de no se deshacerse los nudos burocráticos y lo que definieron como ciertas complicidades económicas, la decisión del gobernante para fortalecer las pymes puede quedar como letra muerta. Las trabas que, según los dirigentes de diferentes asociaciones limitan el desarrollo del sector, van desde requisitos imposibles de cumplir en las licitaciones públicas hasta la competencia de los grandes suplidores del Estado.

La Ley 487-08 consigna que el 15 o el 20% de las compras del Gobierno se debe hacer a través de las pymes. Pero se aduce que por el pago de comisiones y no por competencia de precios, en la práctica los ministerios y direcciones favorecen a empresas que no son del sector. Además de que, según un dirigente, son tantos los requisitos que se exigen que ningún micro o pequeño empresario reúne las condiciones para participar en una licitación. Así de simple.

Se aduce que ahora mismo “hay una licitación del desayuno escolar en la que se piden 23 requisitos que son imposibles de alcanzar, como por ejemplo presentar 10 facturas de clientes similares a los que se les han prestado servicios”. El empresario Isaachart Burgos no vaciló en ir al grano al explicar que se trata de un asunto de comisiones, no de precios. “Lo que pasa es”, dijo, “que a mí como industrial no me pueden pedir comisión, pero sí se puede con productos importados”.

Si es como han alegado los dirigentes empresariales, el mandatario tendrá que intervenir para transparentar el sistema sobre las compras gubernamentales. Como colofón, el presidente de la Asociación Dominicana de Industrias Gráficas citó que a pesar de los modernos equipos ningún miembro de esa entidad ha podido participar, por los términos de referencia, en las licitaciones convocadas por el Ministerio de Educación para la compra de libros y material gastable.

Buenas medidas y declaraciones para dinamizar las pymes han sobrado. Lo que ha faltado, por lo visto, es que se remuevan aparentes trampas disfrazadas para que se cumplan, con todos los beneficios que implican para el desarrollo de las micro, pequeñas y medianas empresas.