DALLAS.– Las series de playoffs de alto riesgo son el espejo definitivo: las revelaciones que un jugador puede hacer consigo mismo y sobre su equipo quedan al descubierto.
Y cuando nos miramos en este espejo de los playoffs, varias cosas se iluminan.
Como si Jason Kidd fuera un entrenador de nivel de campeonato, sin equívocos ni pensativos dos veces.
Como que Luka Doncic y Kyrie Irving son uno de los dúos de juegos importantes más potentes que hemos visto en los últimos tiempos, ahora a cinco victorias de la validación definitiva.
Y lo que es más importante, como los Minnesota Timberwolves , que ven las duras lecciones de los playoffs que deben aprender antes de poder alcanzar el calibre de un campeonato.
Los Dallas Mavericks avanzarán a las Finales de la NBA, salvo que ocurra algo histórico o imprevisto, en los próximos días. Los Timberwolves, en virtud de una derrota de 116-107 que los deja tres juegos a cero, iniciarán el proceso de evaluación.

Cuando pierdes tres partidas cerradas seguidas contra el mismo oponente de manera similar, eso dice mucho de ti, más que del oponente. A los equipos jóvenes, o con mucha inexperiencia, les cuesta cerrar los partidos. Ha sido la razón por la que los Mavericks han ganado los tres partidos hasta ahora y los Timberwolves no pueden descifrar el código.
Los Timberwolves lamentarán las jugadas perdidas; Se lamentarán del coeficiente intelectual de baloncesto sobre la marcha que les falta en los momentos críticos, en los que se destacaron durante las dos primeras rondas de estos playoffs. Oirán el rugido de la multitud del American Airlines Center, los cánticos de “barrido” que llovieron en los últimos segundos de esta derrota.
Minnesota perdía 107-105 faltando 3:21, pero no anotó otro gol de campo hasta que una bandeja de Anthony Edwards faltaban 15 segundos y el partido se decidió. El equipo anotó un gol de campo en los últimos tres minutos del Juego 2, cuando desperdició la oportunidad de empatar la serie.
Lo mismo ocurre en el Juego 1.
Se está volviendo mental aquí y, a pesar del éxito en su camino para llegar hasta aquí, vale la pena examinarlo. No se dan por vencidos, están haciendo ajustes en su forma de defender y haciendo esfuerzos adicionales.
En Números
14
Puntos
Y 11 rebotes aportó en el tercer juego para los Wolves, Karl Towns, quien tuvo su peor noche en la serie. Falló sus ocho intentos de triples y acertó 5 de
Por: Vicente Buena Voluntad
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