Un joven de 27 años que padece de epilepsia se encuentra desaparecido desde el jueves luego de que alegadamente una ambulancia del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad (911) lo trasladara a un centro de salud tras sufrir un ataque de la enfermedad.
Amancia Montaño, madre del desaparecido José Manuel Arias, detalló que las autoridades del hospital Francisco Moscoso Puello niegan que allí recibieran a José Manuel la noche del jueves, como asegura el 911.
Montaño pidió a quien conozca el paradero de su hijo notificarlo a cualquiera de los teléfonos: (809) 540-4532, (829) 439-3502, (809) 563-2563 y (809) 238-0190. Declaró que desde que notaron la ausencia de José Manuel toda la familia vive angustiada, a la expectativa y rogando que el muchacho vuelva a casa sano y salvo.
Según le notificaron los vecinos, José Manuel sufrió un ataque en la calle 45 del sector Cristo Rey, Distrito Nacional, cerca de las 11:00 de la noche próximo a un colmado en Cristo Rey, tras lo cual recibió la asistencia de una ambulancia por el llamado de los residentes del lugar.
Los vecinos le indicaron que cuando sufrió el ataque el joven sólo usaba ropa interior, tipo pantalones cortos. La madre dijo que en su casa notaron la ausencia de José Manuel al día siguiente, ya que éste al parecer salió cuando todos dormían.
Ese día su hijo había sufrido otros dos ataques, relató, y al caer al suelo se había lesionado la barbilla y el cuello. Recibió atenciones en la mañana y entrada la noche en el Moscoso Puello.
Montaño indicó que reside en el callejón U de la calle 43 de Cristo Rey.
José Manuel es el segundo de sus cuatro hijos, luce normal pero padece de frecuentes ataques desde los ocho años, dijo la madre. Explicó que su condición se debe a que a los cinco una motocicleta lo chocó causándole un gran golpe en la cabeza.
La señora Montaño aseguró que su hijo a veces obtiene algo de dinero lavando carros, limpiando zapatos y ayudando a las personas a botar basura, por lo que se ha ganado el cariño de los residentes de Cristo Rey.
La familia ha visitado todos los hospitales del Distrito Nacional y puso la denuncia en la Policía, pero a una semana de la desaparición no han podido dar con su paradero.
