Madrid. EFE. El pianista norteamericano de origen judío Leon Fleisher, que durante décadas tocó únicamente con la mano izquierda a causa de una grave lesión en la derecha, ha falleció el domingo en un hospital de Baltimore a los 92 años, según ha informado su hijo Julian en un tuit publicado hace unas horas.
«Mi padre murió hoy. El último de su clase, fue un monje que trabajó en la Iglesia de la Música», dice su hijo, quien recomienda en el mismo tuit la lectura de un artículo sobre su padre que escribió en 2004 el crítico musical del New Yorker Alex Ross, «una hermosa pieza sobre él que todavía suena a verdad», señala Fleisher.
En la columna, Ross citaba al pianista, compositor, director de orquesta y maestro, un virtuoso como pocos, capaz de superar la adversidad de perder la movilidad de su mano derecha y seguir tocando, componiendo piezas sólo para la izquierda: «Hay tan pocas notas, pero tantas implicaciones», le dijo entonces.
«También era un buen tipo. Un buen amigo que se rió de todos mis chistes. Lo extrañaré, pero la melodía perdura», concluye Julian sobre la pérdida de su padre.
Fleisher (San Francisco, 1928), comenzó sus estudios de piano con solo cuatro años y a los ocho ya había debutado con público. Tocó a los 16 con la New York Philharmonic: fue un niño prodigio aceptado en sus clases nada menos que por Artur Schnabel, y también estudió con Maria Curcio, última pupila del anterior.