Santo Domingo.-Las autoridades ejecutaron la segunda fase del operativo preventivo contra el microtráfico en el sector Capotillo, Distrito Nacional, en el cual en esta ocasión incautaron sustancias ilícitas, dinero en efectivo, equipos electrónicos y siete personas fueron detenidas.

Durante la operación, en la que participaron 60 agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y siete miembros del Ministerio Público (MP), se incautaron un total de 10 mil 126 gramos de distintas drogas en diferentes puntos de venta y distribución.

El comunicado de prensa detalla 7,323 gramos de cocaína, 1,155 gramos de marihuana, 1,646 de un material rocoso, posiblemente crack; y una porción de un material cristalino, que se presume es “molly”.

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Continúa vigilancia extrema en Capotillo

Las autoridades aseguran que, tras realizar los levantamientos correspondientes, se procedió a ejecutar seis allanamientos en los puntos de venta y distribución de las sustancias ilícitas.

Indicaron que esas operaciones en el populoso sector capitaleño dieron igualmente como resultado la incautación de 10 balanzas, cuatro celulares, una radio de comunicación, siete máquinas tragamonedas y la suma de 45 mil 335 pesos, entre otros elementos.

“En los allanamientos fueron arrestados siete hombres, los cuales serían entregados al Ministerio Público, para conocerle medidas de coerción en las próximas horas por violación a la Ley 50-88, sobre drogas y sustancias controladas”, afirman.

Primer operativo

El pasado sábado 31 de mayo del presente año, tanto el Ministerio Público como la DNCD y el Ejército dominicano realizaron un operativo conjunto en esa demarcación para desmantelar una supuesta red de videovigilancia ilegal que operaba.

Según estas instituciones, las cámaras eran utilizadas para evadir las labores de combate de la delincuencia desarrolladas por los organismos de seguridad del Estado dominicano.

Desde entonces, las agencias del orden anunciaron que permanecerían en Capotillo, hasta garantizar la seguridad completa del territorio, con “el objetivo de que las personas de bien que residen en ese lugar puedan desarrollar sus labores cotidianas con un mayor nivel de seguridad”, expresaron.

Otro motivo de estas operaciones, es el restaurar el orden público en ese sector, ya que desde el 2020 se ha sumado a estas problemáticas un aumento de fiestas callejeras.

Individuos amanecen con alto volumen de música, se consume bebidas alcohólicas y sustancias ilícitas, violentando las normas de convivencia, según residentes.