El próximo sábado se cumplen dos siglos del nacimiento del Padre de la Patria de República Dominicana, Juan Pablo Duarte y Díez, ocasión de excepción que honrarán tanto Efemérides Patrias y el Archivo General de la Nación que dirigen los prestantes historiadores Juan Daniel Balcácer y Roberto Cassá, respectivamente, con apoyo del presidente Danilo Medina.
Duarte es el Padre de la Patria por ser el primero que concibió el proyecto del nacimiento de República Dominicana, a diferencia de la concepción de José Núñez de Cáceres y Albor, que limitaba incorporar la idea a La Gran Colombia, cuando los compromisos de Simón Bolívar estaban alineados con Alexander Petion, quien suministró armas y recursos económicos a Bolívar en su acción libertadora.
Contando apenas 25 años de edad, Duarte inicia su accionar emancipador al fundar la Sociedad Secreta La Trinitaria el 16 de julio de 1833 en la casa de doña Josefa Antonia Pérez de la Paz (doña Chepita), calle arzobispo Nouel, frente a la iglesia del Carmen, y madre del trinitario Juan Isidro Pérez. Ahí nació la patria dominicana.
El futuro Estado dominicano estaba ocupado desde l822 por el vecino Haití, y Duarte y Los Trinitarios estaban muy vigilados, prueba es que el interventor Charles Herard Riviere persigue a Duarte y Los Trinitarios y los expulsa el 2 de agosto de 1843,saliendo los patriotas hacia Saint Thomas y luego a La Guaira, Venezuela.
Desde Caracas, Duarte pide a su familia vender los bienes heredados de su padre Juan José Duarte y encausar los recursos a la causa de la independencia, gesto como todos los que enmarcaron su accionar, de sacrificios y abnegación a su proyecto de nación libre é independiente o se hunde la isla.
El suceso magno de nacer República Dominicana el 27 de febrero de 1844 con el trabucazo disparado por Matías Ramón Mella en la puerta de la Misericordia, sorprende a Duarte en su exilio venezolano, regresando al país el 15 de marzo de 1844, recibido en la puerta de Don Diego por el arzobispo Tomás de Portes é Infante con la salutación;Salve Padre de la Patria, el primero que pronunció ese concepto, que ha prevalecido con el tiempo.
La Junta Central Gubernativa que presidía el pérfido Tomás Bobadilla y Briones designa a Duarte comandante del Departamento de Santo Domingo y luego oficial superior ayudante del general Pedro Santana, jefe expedicionario de los ejércitos del sur, ordenándole la Junta Central Gubernativa a Duarte regresar a la capital, porque la tropa del general Santana no aceptó la designación de Duarte.
El general Santana ordena apresar a Duarte que se encontraba en la finca de su amigo Pedro Deuveaux, en Jamao, Puerto Plata, acción que cumplió el general Pedro Ramón de Mena, remitido a la capital en la goleta Separación comandada por el capitán de navío Juan Bautista Cambiaso, deportado a Hamburgo, Alemania.
Sufrió el acto proditorio de la anexión a España por el poder económico criollo representado por el general Santana el nefasto 18 de marzo de 1861, y el estallido de la guerra restauradora del 16 de agosto de 1863 le sorprende en Venezuela.
Regresa al país desde Haití por Montecristi el 25 de marzo de 1864, recibido por el general Benito Monción, ofreciendo sus servicios al renacer de la República al gobierno restaurador, que le designa emisario ante los gobiernos de Venezuela, Perú y Colombia, que Duarte, herido en lo más sensible de su alma, declinó, alegando problemas de salud.
Es posible apreciar en esta reseña los sacrificios, traiciones, vejámenes de extraños y propios que sufrió el Padre de la Patria en reciprocidad a su concepción pionera de fundar República Dominicana y su abnegada entrega a su proyecto libertario.
Extraigamos lecturas y lecciones, aprendamos y superemos las lacras perversas de los politiqueros y exaltemos a Juan Pablo Duarte como el auténtico Padre Unigénito de la patria dominicana.