Pal Campamento, una desternillante producción con criterio familiar apoyada tanto en la tradición de asertivo director y guionista en el gusto de la gente, representa una reafirmación de la comedia, como género líder de asistencia.

La producción, proyectada anoche en sesión premier en Palacio del Cine Ágora Mal y que protagonizan Kenny Grullón, Roberto Ángel Salcedo y Manolo Ozuna, quien vuelve a sobresalir por su talento para la interpretación del chiste oral, con un repertorio de entonaciones y expresiones, que reafirman su talento. Su interpretación está llamada a marcar el espíritu de la gente, deseosa de reír de buena gana a pesar de todo lo que socialmente presiona la vida cotidiana nacional.

Pal campamento, que se estrena pasado mañana con pre-estreno este miércoles fílmicamente inicia con tomas de un buen cine de exteriores, sobresaliendo tanto las tomas como la fotografía, una de las mejor logradas en el trabajo de Salcedo, junto a una musicalización, de Amaury Sánchez que cumple con su papel en un trabajo que es más de diálogo que musical.

Dentro del marco de la filmografía de Salcedo, es un avance, pero sigue pendiente la deuda de desarrollar conceptos despojados del simplismo televisivo, que ha demostrado potencial taquillero, pero que le seguirá generando la aversión, en muchos casos, justa, de la critica especializada.

Actoralmente

Ozuna se roba el show sin duda alguna. El personaje que le asigna Salcedo era como para eso.

Kenny, excelente actor cómico, mantiene una actuación promedio y el propio Salcedo pudo haber dado mucho más.

Honny Estrella, cara y cuerpo hermosos que guardan un talento verdadero, logra desdoblarse y representar un mujer de voz nasal y media lengua, que constituye un atractivo y que la hubiéramos preferido con mayor la auto-estima para no tener que ofrecerse a nadie con una insistencia rayana en el servilismo emocional.

Techy Fatule desarrolla su primer protagónico del cine con integridad y entrega, mientras que José Guillermo Cortines seguirá siendo uno de los mejores anunciantes del gimnasio, la envidia de los hombres de barriguita cervecera y la ilusión de las mujeres que sólo ven carne. Es mucho mejor actor que lo que vimos en pantalla.

Razón del impacto

A Roberto Ángel Salcedo, como cineasta se le podrá criticar cinematográficamente cuanto usted quiera, pero lo que fuera de duda queda es que auspicia la industria del cine, produciendo fuente de trabajo para técnicos y artistas. Que ahora viene con dos proyectos por año y que tiene visión y condiciones para promover y mercadear sus obras con el tiempo profesionalmente necesario para fijarlas en el gusto de quien paga la entrada.

Probablemente necesite especializarse en dirección, el guión o la actuación, pero mientras sus ventas le sigan, parece que su decisión es clara: hacer ese cine que muestra potencial en carcajadas y resultados económicos.