Al aclarar denuncias sobre el deterioro de planteles y la mala conducta atribuida a profesores, el ministro de Educación, Ángel Hernández, señaló que en el último cuatrienio el sistema de enseñanza se ha fortalecido como nunca.
Pero los avances que cita el funcionario, aunque son importantes, no guardan proporción con los cuantiosos recursos que ha manejado la cartera a través del 4 % que recibe desde hace 12 años.
A Hernández hay que reconocerle un gran esfuerzo en la tarea, como dijo, de establecer los cimientos para remover las estructuras que obstaculizan alcanzar mayores niveles de eficiencia y eficacia. Pero los males, que se arrastran desde hace años, no se pueden ignorar.
El funcionario no puede asumir todos los problemas como si fueran responsabilidad suya, pero tampoco pretender que se ignoren o se reclame que se resuelvan.