Cocoband cumple 36 años. Va rumbo a los 40 sin perder la esencia refranera y popular que desde sus inicios exhibe como sello distintivo en la industria musical.
Pochy Familia, su líder, asegura que permanecer todo este tiempo en el gusto y el favor de la gente “no es fleco de coco”.
Haciendo una retrospectiva dice que Cocoband no ha sido un grupo musical común ya que, además de ser su primer hijo musical, fue su primera experiencia como empresario, como director y como un miembro de su familia que la ayudó económicamente a tener un mejor nivel de vida.
“Cocoband es una empresa que me ha permitido criar a mis cinco hijos, por lo que no tenemos con qué pagarle a esa estructura musical. En sus 36 años de vida ha colaborado con la alegría de la gente, nunca se ha visto en conflictos, ni cosas feas, solo se ha dedicado a brindar alegría”.
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Uno de los motivos de más alegría, confiesa, es que la agrupación se ha convertido en la banda sonora de toda una generación, de muchas personas que hoy se encuentran con él en cualquier parte del mundo y se lo manifiestan.
“Toda esa evolución que ha tenido el grupo durante estos años ha valido la pena. Uno ha colaborado con las emociones positivas, no solo de los dominicanos, sino del público de Latinoamérica y de los latinos en Europa”, explica.
Durante un encuentro con miembros de la prensa Pochy expresa que durante tantos años “ustedes supieron soportarme momentos de inmadurez y ahora me están soportando momentos de madurez”, dice y ríe.
El intérprete de Pa’ los coquitos también agradece que con la agrupación pudo costearse sus estudios universitarios, y aplicar los conocimientos adquiridos para un mejor desarrollo de la clase artística.
Actualmente Familia es secretario de la Sociedad Dominicana de Artistas, Intérpretes y Ejecutantes (Sodaie), institución que fundó junto a Ramón Orlando Valoy, Chuqui Acosta, Crispín Fernández, Maridalia Hernández, Jorge Taveras, Roldán, Adalgisa Pantaleón y otros. Desde esa plataforma ha luchado por las reivindicaciones de la clase artística, a través de la implementación y el cumplimiento de la ley de derecho de autor en República Dominicana.
Familia recordó que Cocoband es un grupo madre del que surgieron otros como Rokabanda, Kinito Méndez, Rikarena.
“Hay que destacar algo muy importante, mucha gente que no se atrevía a hacer música después de Cocoband tuvo el arrojo para hacerlo, gente que en su momento pensó ‘si ellos pudieron, nosotros también podemos’, y qué bueno”.
Familia agradece a quienes desde el primer día creyeron en el proyecto y trabajaron para hacer de Cocoband una realidad que hoy se mantiene con la misma energía.
“Quiero agradecer a Kinito, Bobby Rafael, Janibell, Silvio Sosa, Elvis Clase, Amable Valenzuela, Domingo Bautista, Bebeto, Güicho Pichardo, Mateo San Martín, quien fue nuestro disquero; también a Mon Lluberes, David “Cobrate”, a todas esas personas que de una forma u otra han puesto todas sus experiencias y relaciones a favor de este proyecto”, destaca.
Sobre la familia Barceló asegura: “No todo artista puede llevarse el privilegio de poder presentarse en esa meca que es el Estadio Olímpico. La familia Barceló depositó su confianza en nosotros, junto a Julio Pichardo, Luisín Mejía, Nandy Rivas, por lo que siempre estaré eternamente agradecido”, expresa al recordar esa gran hazaña, de 1992.
Nuevo álbum
Pochy familia alista una nueva producción discográfica que cataloga de novedosa en la que, además de su inigualable merengue, incluirá 10 canciones, tres de ellas en una fusión que ha denominado “bachacoco”.
“La jefa” es el primer corte de este álbum que contiene las bachatas “No me den consejos”, “El que llega a viejo pobre” y “Soy el negro que te gusta”. También los merengues “La mujer que pide algo tiene que da’”, “Pablito”, “Tengo 50 ¿Y qué?”, entre otros.
La magia de Cocoband
Los músicos son la parte esencial de Cocoband, por eso Pochy hace hincapié en reconocer a Kelvin Castillo, El Beco, Eduardo, “que fueron los que le dieron esa expresión percusiva y en los coros no puedo dejar de mencionar a Henry García, que fue artífice determinante para ese timbre sonoro que ustedes conocen. Crispín Fernández y Papo Cadena que fueron los saxofones, con esos picados que nadie se atrevía a hacer, creando una escuela nueva en el merengue, una combinación que marcó un antes y un después de Cocoband”.
