Avispero.-
La democracia exhibe su debilidad y los legisladores su incapacidad con el reperpero creado por una petición de la diputada Faride Raful y otros tres colegas de su Partido Revolucionario Moderno (PRM) para que se investiguen pagos por 1,400 millones de pesos a empresas vinculadas al publicista brasileño Joao Santana y su esposa Mónica Moura.
Como si se tratara de una ofensa o de un atentado contra la integridad del Gobierno, la propuesta, con la que no se acusa a nadie en particular, provocó una airada reacción, que por cierto deja mucho que desear del diputado peledeísta Radhamés Camacho.
Si el Gobierno pagó 1,400 millones de pesos entre 2012 y 2016 a Santana y su esposa, ambos procesados en su país por lavado y corrupción, el Congreso haría un aporte a la transparencia con la designación de una comisión para investigar las operaciones. Es parte de sus funciones.