Manejar el tiempo entre la profesión y el hogar es el gran problema de muchas mujeres de hoy, sobre todo si ejercen profesiones tan demandantes como las relacionadas a la salud. Los tiempos han cambiado y la mujer no tiene que pasarse el día en el hogar, para poder ser buena madre, lo importante es la calidad del tiempo y el amor y seguridad que demos a nuestros hijos.
Varias profesionales nos cuentan sus experiencias de madres y esposas coincidiendo en que independientemente ser profesionales destacadas en sus áreas, priorizan en su familia.
Tania Medina, cirujana, es madre de Letizia Marie, Danielle Marie y los mellizos Paula Sophia y Pablo Daniel García Medina, de quienes dice, son su razón de vivir. “Es el rol que más disfruto desempeñar. Como cirujana plástica hago todo lo posible por ofrecer a mis pacientes mi mejor imagen y mi mejor servicio, pero sin descuidar a mi familia”.
Olga Renville, psicóloga, confiesa que “Karla, Giancarlo y Oscar son el regalo más bello que Dios me ha dado. Trato de hacer bien el papel de madre, pero siempre tengo muy claro que mis pacientes esperan por mí. De hecho, cumplir bien mi rol de mamá, me permite como sicóloga, tener una mejor conducta a la hora de desempeñar mi trabajo”, dijo.
Yesenia Matos, oftalmóloga, tiene claro que sus hijas Maryoli e Isabela están por encima de todo. Desde su óptica, ser madre es lo mejor que le ha pasado en la vida. “Esa felicidad es precisamente la que me impulsa a ver a mis pacientes con otro ojo. Sí, con el del respeto, la confianza y el amor al prójimo” explicó.
Yocasta Caba, odontóloga, admite su pasión por la odontología, pero crea su mejor sonrisa para sus hijas Ana Sabrina y Pamela, quienes asegura son su estímulo y su motor para cumplir diariamente con las tareas que les toca desempeñar. “Es un gran compromiso ser mamá y al mismo tiempo dedicarse a un área tan demandante como es la salud”.