En UASD sopla crisis.-

La incertidumbre ha vuelto a instalarse en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) en lo relativo a la apertura del próximo semestre.

La Federación d Asociaciones de Profesores Universitarios (Faprouasd) amenazó con impedir que la docencia se inicie desde el próximo martes 30 si la Rectoría no cumple con un aumento salarial de un 5% a los educadores y el pago de tres meses atrasados.

La decisión crearía un caos que debe evitarse a través del mecanismo más adecuado, que es el diálogo. El rector Iván Grullón debe buscar la manera de sentarse a conversar con el presidente de Faprouasd, Santiago Guillermo, y demás gremialistas para evitar que unos 200 mil estudiantes se afecten con el inicio de la docencia.

A propósito de la nueva crisis que amenaza con trastornar las actividades de la UASD hay que insistir en la necesidad de explorar alguna fórmula para adecentar la casa de estudios.

Aunque sea una universidad pública es tiempo de que la UASD extirpe el populismo y otras lacras que le han impedido mejorar sus aportes a la sociedad.

La academia requiere desde hace tiempo una verdadera transformación no solo para proporcionar profesionales con la mayor calificación, sino para que su contribución al desarrollo económico y social sea más significativo.

La apertura de cada semestre no puede plantear siempre un conflicto, cuando no por una cosa, por la otra. La academia tiene que dejar atrás esa etapa, que tanto daña su imagen y la de sus productos.