Ajuste fiscal suena alarma.-

Con la mejoría que se ha dado cuenta en las recaudaciones y las acciones para perseguir la evasión fiscal podía pensarse que no hacía falta el ajuste fiscal que ha recomendado el Fondo Monetario Internacional (FMI) para garantizar la sostenibilidad de la deuda pública.

Pero tal parece, por lo visto, que el problema del endeudamiento es más complicado que las fórmulas a que suelen recurrir las autoridades para minimizarlo o tranquilizar a la población.

El FMI, que solo ve soluciones, recomienda una reforma tributaria que amplíe la base y simplifique el esquema impositivo en el país. De inmediato el vicepresidente del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), Ernesto Selman, recordó que la entidad había advertido que la tendencia del endeudamiento y su costo están incidiendo en el desenvolvimiento económico y las finanzas nacionales.

Mientras el economista Miguel Ceara Hatton condicionó un nuevo sistema fiscal a la eficientización del gasto público, consolidación del sistema institucional y definición de los criterios del endeudamiento, entre otros. A su juicio los motores de ese endeudamiento que tanto preocupa al FMI son el déficit fiscal y la venta de certificados del Banco Central.

La deuda ronda los 37 mil millones de dólares, equivalentes al 50% del Producto Interno Bruto (PIB). La recomendación del FMI pone sobre el tapete un tema espinoso, aunque por ahora el silencio haya sido la respuesta del sector oficial.