Dirección ética

Baila en lío

En tanto crecen los reclamos para que los miembros de la Cámara de Cuentas sean sometidos a un juicio político por los aumentos de sueldos que hicieron, calificados de inconstitucionales por el presidente del Senado, se ha prestado a conjeturas la valoración de un 100% en transparencia que otorgó a la entidad la Dirección de Ética Gubernamental.

Cabe suponer que la entidad que preside Lidio Cadet no evaluó a plenitud decisiones como la cuestionada alza salarial y los múltiples gastos que se han denunciado en la unidad que vela por la correcta aplicación de las normas contables.

Desde que se conoció el aumento salarial de los miembros y ejecutivos de una entidad que se había quejado de la falta de recursos para cumplir con sus responsabilidades se ha creado un revuelo mayúsculo.

El movimiento cívico Participación Ciudadana, el obispo Víctor Masalles, de Baní, y otros sectores han demandado que el presidente Hugo Álvarez Pérez y demás miembros de la Cámara de Cuentas sean enjuiciados por el Congreso por la violación en que han incurrido.

Sin embargo, Álvarez Pérez, al defender los polémicos aumentos, destacó que el pleno no hizo más que aplicar una resolución que data de 2013.

En medio de la tormenta ha salido a relucir, además, los supuestos gastos superfluos, en torno a los cuales sus autoridades han guardado silencio. Ante el escándalo la última palabra la tendrán los legisladores, quienes podrían terminar echándole agua para enfriarlo.